Como hoosiers con discapacidades, sabemos y entendemos la manera en que la COVID-19 ha impactado y continœa impactando a los hoosiers en nuestra comunidad de discapacitados, de forma diferente a otros ciudadanos hoosiers. Vemos y sentimos la presi—n que est‡ ejerciendo sobre nuestros sistemas pœblicos, comprometiendo nuestra atenci—n mŽdica y limitando nuestro acceso a los apoyos en nuestro hogar, educaci—n, empleo y servicios de transporte. A medida que nuestro pa’s y nuestro estado se han ÒabiertoÓ, muchos de nosotros continuamos qued‡ndonos en casa para permanecer seguros, mientras que algunos de nosotros hemos comenzado a reingresar a la fuerza laboral, a utilizar el transporte pœblico y a participar en espacios comunitarios, solo para regresar a nuestros hogares cada vez que hay un aumento en los casos de la COVID-19 o un rebrote del virus. Para aquellos de nosotros que hemos pasado a tener una condici—n de vivienda inestable durante la pandemia, el miedo a la infecci—n (y a la posible muerte) es constante. Tenemos miedo de que las pocas opciones y el control que tenemos actualmente sobre nuestras vidas puedan estar en peligro. El riesgo de la institucionalizaci—n nunca ha sido m‡s real. Al principio de la pandemia de la COVID-19, el Consejo de Vida Independiente del Estado de Indiana (Indiana Statewide Independent Living Council, INSILC) cre— recursos para que nuestros compa–eros con discapacidades los utilizaran cuando navegaran por nuestro sistema de atenci—n mŽdica a menudo prejuicioso y discriminatorio. Estos documentos se pueden encontrar en varios idiomas y formatos accesibles en: https://www.insilc.org/covid-19/. Hoy, compartimos un nuevo recurso para ayudar a nuestros compa–eros a navegar la pandemia en curso: la gu’a del INSILC sobre las vacunas contra la COVID-19 y la atenci—n domiciliaria y comunitaria. La informaci—n en este recurso es espec’fica para las vacunas contra la COVID-19 y los proveedores de atenci—n domiciliaria y comunitaria o el personal que ingresa a nuestros hogares. Muchos de nosotros necesitamos los apoyos y servicios en el hogar y la comunidad para sobrevivir, progresar y estar integrados de manera significativa en la sociedad. Por ende, m‡s personas ingresan a nuestros hogares y espacios, lo que nos pone autom‡ticamente en un mayor riesgo de contraer la COVID-19. Pero cuando las personas que nos brindan estos apoyos y servicios ingresan a nuestros hogares sin vacunarse, este riesgo aumenta significativamente. La mayor’a de nosotros utilizamos los apoyos y servicios en el hogar y la comunidad estamos vacunados, lo que mitiga el riesgo de contraer la COVID-19 y la probabilidad de morir a causa del virus si lo contraemos. Sin embargo, hay varios de nosotros cuyas discapacidades y condiciones preexistentes nos impiden vacunarnos. Y estar vacunado no es garant’a de que nuestro sistema inmunol—gico sea tan resistente, lo que puede afectar la efectividad de la vacuna. Por lo tanto, a menudo necesitamos tomar medidas de precauci—n adicionales para garantizar nuestra salud y seguridad. Una de esas medidas es preguntar y saber si las personas que ingresan a nuestras casas est‡n vacunadas. Pero, Àc—mo hacemos esto o averiguamos esta informaci—n? ÀQuŽ derecho(s) tenemos para preguntar si alguien que ingresa a nuestra casa est‡ vacunado con el fin de protegernos y mantenernos lo m‡s saludables y seguros posible? Para responder a estas preguntas, el INSILC desarroll— la gu’a del INSILC sobre las vacunas contra la COVID-19 y la atenci—n domiciliaria y comunitaria, para ayudar a nuestros compa–eros a navegar a travŽs de estos escenarios complicados y a menudo inc—modos. ÁEsperamos que esta gu’a le resulte informativa y sea una herramienta œtil y enriquecedora! Con mucho amor y solidaridad, El equipo del INSILC Para satisfacer las distintas necesidades de accesibilidad de nuestra comunidad de discapacitados, la gu’a est‡ en nuestro sitio web (www.INSILC.org) en PDF, texto sin formato, letra est‡ndar, letra grande y espa–ol. Si necesita la gu’a en otro formato o idioma, comun’quese con nosotros, Áestaremos encantados de proporcionarle esta adaptaci—n! Gu’a del INSILC sobre las vacunas contra la COVID-19 y la atenci—n domiciliaria y comunitaria ÀQuŽ dice la ley? Lo que la ley permite y no permite cuando se trata de mandatos relacionados con la vacunaci—n y la solicitud de informaci—n sobre el estado de vacunaci—n de una persona ha sido un tema candente durante la pandemia de la COVID-19. A medida que nuestras comunidades se han reabierto y las leyes y las directrices se han movido y han cambiado, muchos de nosotros nos hemos sentido abrumados y confundidos por una gran cantidad de informaci—n contradictoria. Desafortunadamente, parte de esta informaci—n ha sido inexacta y utilizada incorrectamente, poniendo en riesgo la vida de nuestros compa–eros con discapacidades de manera innecesaria. Esta gu’a le proporciona informaci—n precisa y actualizada. A continuaci—n, usamos la palabra ÒpersonalÓ para describir a las personas que pueden estar ingresando a su hogar para brindarle apoyos y servicios relacionados con la atenci—n. Esto incluye asistentes de cuidado personal (Personal Care Attendants, PCA), profesionales de apoyo directo (Direct Support Professionals, DSP), asistentes de enfermer’a certificados (Certified Nursing Assistants, CNA), enfermeras pr‡cticas licenciadas (Licensed Practical Nurses, LPN), enfermeras registradas (Registered Nurses, RN), mŽdicos, terapeutas, administradores de casos, coordinadores de atenci—n, etc. Puede preguntarle a su personal si est‡ vacunado. No est‡n obligados a dec’rselo. Si se lo dicen o no, es su elecci—n. Sin embargo, no existen leyes vigentes que les proh’ban compartir con usted la informaci—n sobre su estado de vacunaci—n cuando se les solicite. Puede pedirle a su personal que proporcione pruebas de que est‡ vacunado. No est‡n obligados a proporcionarle las pruebas. Si le proporcionan o no las pruebas, es su elecci—n. Sin embargo, no existen leyes vigentes que les proh’ban compartir el comprobante de su informaci—n de vacunaci—n con usted cuando se les solicite. Su personal puede decirle si est‡ vacunado. No es una violaci—n de la Ley de Transferencia y Responsabilidad de Seguro MŽdico (Health Insurance Portability and Accountability Act, HIPAA) preguntarle a su personal si est‡n vacunados. No es una violaci—n de la HIPAA que su personal le diga si est‡ vacunado. Por lo tanto, es decisi—n de su personal si le informa o no si est‡ vacunado. Tiene derecho a negar la entrada de su personal a su hogar si no est‡ vacunado o se niega a decirle si lo est‡. Los empleadores no pueden decirle si sus empleados (su personal) est‡n vacunados. Sin embargo, los empleadores pueden preguntar a sus empleados (su personal) si han recibido o no una vacuna contra la COVID-19, solicitarles la prueba de que la han recibido y pueden exigir unos controles diarios de temperatura o pruebas peri—dicas con resultados negativos para sus empleados en el sitio. Los empleadores deben mantener la confidencialidad de esta informaci—n mŽdica y no se la pueden revelar a usted. Los empleadores pueden exigir que sus empleados (su personal) reciban una vacuna contra la COVID-19. Los empleadores tambiŽn pueden exigir a los empleados (su personal) que presenten pruebas de que han sido vacunados. Los empleadores pueden informarle si exigen que sus empleados (su personal) reciban una vacuna contra la COVID-19. Los empleadores tambiŽn pueden informarle si exigen que sus empleados les proporcionen un comprobante de vacunaci—n. ÀC—mo puedo protegerme? A continuaci—n, se muestra una lista de las medidas que puede tomar para obtener m‡s informaci—n sobre el estado de vacunaci—n contra la COVID-19 de cualquier personal que ingrese a su hogar y las formas en que puede protegerse. Una vez m‡s, usamos la palabra ÒpersonalÓ para describir a las personas que pueden estar ingresando a su hogar para brindarle apoyos y servicios relacionados con la atenci—n. Esto incluye a los PCA, los DSP, los CNA, las LPN, las RN, mŽdicos, terapeutas, administradores de casos, coordinadores de atenci—n, etc. 1. Pregœntele a su proveedor si tiene una pol’tica que exija que todos sus empleados reciban la vacuna contra la COVID-19. 2. Pregœntele a su proveedor si tiene una pol’tica que obligue a sus empleados a proporcionar pruebas de que han recibido la vacuna contra la COVID-19. * Las pol’ticas que exigen pruebas de vacunaci—n son m‡s confiables que las pol’ticas de divulgaci—n voluntaria. 3. Pregœntele a su proveedor si ha implementado ex‡menes de salud/seguridad relacionados con la COVID-19 para los empleados. * Los ex‡menes de temperatura diarios, las pruebas con regularidad y la divulgaci—n voluntaria de los s’ntomas de la COVID-19 son las formas m‡s comunes en que los empleadores examinan a sus empleados. * Recuerde: los empleadores no pueden divulgar ni compartir esta informaci—n mŽdica con usted. 4. Pregœntele a su proveedor si ha implementado un mandato relacionado con el uso de la mascarilla para todos sus empleados (su personal). * Asegœrese de hacerle esta pregunta directamente al proveedor (empleador) y no dependa del personal que ingrese a su hogar. Es posible que el personal no responda con precisi—n a su pregunta. * Si su proveedor tiene un mandato relacionado con el uso de la mascarilla y su personal no usa o no usar‡ una mascarilla en su hogar, asegœrese de preguntarle a su proveedor c—mo puede reportar a este personal. 5. Solicite (exija) a todas las personas que entren y trabajen en su hogar que usen mascarillas y guantes. * Es posible que deba proporcionar mascarillas y guantes desechables para su personal si estos art’culos aœn no est‡n disponibles para ellos a travŽs de su proveedor o su plan de seguro. * TambiŽn puede optar por usar una mascarilla y guantes. 6. Pregunte a todo su personal si han recibido la vacuna contra la COVID-19. Tiene derecho a negar el acceso a su hogar a cualquier miembro del personal que no estŽ vacunado, que se niegue a responder si est‡ vacunado o que se niegue a usar una mascarilla o guantes cuando estŽ en su hogar. EXENCIONES DE RESPONSABILIDAD: 1. Algunos empleados pueden estar exentos de los requisitos de las vacunas y/o las pruebas debido a una discapacidad o exenciones religiosas. Es decir, incluso si el empleador exige que sus empleados estŽn vacunados, puede ser una buena idea preguntar a las personas que ingresan a su hogar si est‡n vacunadas. 2. Hay pros y contras de no permitir que entre a su hogar el personal que no estŽ vacunado o que no revele su estado de vacunaci—n. Puede resultar en que no se satisfagan sus necesidades de atenci—n y no hay garant’a de que su proveedor pueda reemplazar al personal. Esta acci—n puede ponerlo en riesgo de inicializaci—n, as’ que asegœrese de sopesar los beneficios y los inconvenientes de negar el acceso del personal a su hogar. 3. La orientaci—n federal, las leyes estatales y locales est‡n sujetas a cambios. La informaci—n que se presenta en esta gu’a est‡ actualizada al 10 de noviembre de 2021. El INSILC har‡ todo lo posible para actualizar esta gu’a a medida que se modifiquen las leyes o directrices federales, estatales o locales correspondientes. 4. Esta gu’a es solo para fines informativos y no es un consejo legal. Para cualquier pregunta o inquietud legal, consulte a un abogado con licencia en su jurisdicci—n. Indiana Statewide Independent Living Council 615 N. Alabama St., Ste 140 Indianapolis, IN 46204 T 1-844-4INSILC (l’nea gratuita) info@insilc.org